El renombrado comentarista Jerry Foltz ha agitado el mundo del golf al sugerir que un cambio de regla monumental en el deporte está diseñado exclusivamente para salvaguardar dos icónicos campos de golf: St. Andrews y Augusta National.
El cambio de regla, que entrará en vigor a partir de 2028, estipula que una pelota de golf no puede exceder una distancia de 320 yardas cuando se golpea con una velocidad de cabeza de palo de 125 mph durante las pruebas. Esta regulación, conocida como el ‘rollback de la pelota’, se está introduciendo en un momento en que golfistas como Rory McIlroy y Bryson DeChambeau están estableciendo constantemente nuevos récords de distancias de conducción.
La introducción del ‘rollback de la pelota’ ha suscitado un clamor entre los golfistas y los aficionados por igual. Especialmente notable fue la victoria de DeChambeau en el US Open 2020 en Winged Foot, donde utilizó una estrategia de ‘bombardeo y medición’, una táctica que anteriormente se consideraba inalcanzable en el infame y desafiante campo de Mamaroneck.
Esta tendencia de drives récord, como el 59 de Jake Knapp en PGA National, está remodelando el paisaje del golf profesional. La crítica ha ido en aumento, particularmente después de la notable primera ronda de Knapp en el Cognizant Classic, donde los aficionados expresaron su preocupación por la facilidad con la que los profesionales están navegando los actuales diseños de los campos.
Foltz, durante su aparición en el podcast Fairway to Heaven, expresó su creencia de que proteger St. Andrews y Augusta National es la principal motivación detrás del inminente cambio de regla. Dijo: «Todos los mejores jugadores y ganadores de majors golpean la pelota lejos. Así es simplemente. Los campos de majors están siendo alargados, aparte de St. Andrews y Augusta, hasta cierto punto. El rollback de la pelota es para proteger esos dos campos y solo esos dos campos.»
En un momento sincero, Foltz desestimó las justificaciones oficiales para el cambio de regla, afirmando: «Pueden decir lo que quieran; es un completo sinsentido. La reducción de la bola por parte de la R&A y la USGA es para Augusta National y St. Andrews, para tratar de proteger esos campos. Mi teoría es que un bajo puntaje todavía gana. No importa si es -30 o -2. Un bajo puntaje todavía gana. Todos están jugando el mismo campo; no importa dónde lo golpeen.»
La implementación de la ‘reducción de la bola’ se proyecta que recortará aproximadamente 12 yardas de la distancia de conducción de un profesional promedio. Para jugadores estrella como DeChambeau y McIlroy, esto vería sus promedios caer a alrededor de 311 y 308 yardas respectivamente. Sin embargo, Foltz predice que con los avances tecnológicos y físicos en curso, las distancias de conducción comenzarán a aumentar nuevamente después de 2028, a pesar de la nueva regla.
No es sorprendente que DeChambeau haya criticado públicamente la inminente regla, expresando su descontento en su canal de YouTube. Estimó que el impacto sería una reducción de 15 a 20 yardas, en lugar de las 10 a 11 yardas proyectadas, y lamentó los cambios que tendría que hacer en su juego para adaptarse a la nueva regulación.
La ‘reducción de la bola’ ha encendido sin duda un acalorado debate dentro de la comunidad golfística, con el foco firmemente en St. Andrews y Augusta National. A medida que se acerca 2028, el mundo del golf estará observando de cerca cómo este cambio radical impacta el deporte.