El juego de golf es una prueba angustiante de habilidad, precisión y estrategia. Un aspecto del deporte que separa a los aficionados de los profesionales es el arte de jugar desde el bunker, particularmente cuando el tiro desde el bunker está entre 40 y 75 yardas del green. Este tiro, según muchos jugadores del PGA Tour, es posiblemente el más difícil en el golf. En medio de este escenario desafiante, Justin Thomas, el dos veces campeón del PGA, reveló quién cree que sobresale en esta habilidad crítica.
En un partido reciente con Grant Horvat, Thomas, quien él mismo ejecutó un espectacular acercamiento desde un bunker de 60 yardas, profundizó en las complejidades de estos tiros. Reconoció la dificultad de hacerlo bien, con el potencial de error siendo alarmantemente alto. Un ligero error de cálculo puede resultar en una situación embarazosa, ya que la bola apenas recorre una fracción de la distancia deseada.
Sin embargo, hay un jugador que Thomas cree que consistentemente acierta estos tiros complicados: Jordan Spieth. Elogió la capacidad de Spieth para hacer un contacto ideal con la bola, incluso desde una posición difícil en el bunker. “Es como el tiro más difícil de todos y casi juegas con un filo,» comentó Thomas. «Pero Jordan es el mejor desde los bunkers. Es tan bueno golpeando en la parte trasera de la bola.”
Spieth, un tres veces campeón de majors, no es ajeno a actuar bajo presión. Sus jugadas desde el bunker son un testimonio de su habilidad y experiencia, y contribuyen significativamente a su estilo entretenido en el campo. Aunque su forma ha sido inconsistente últimamente, los increíbles tiros de bunker de Spieth hacen que sea un espectáculo emocionante, ofreciendo a los aficionados más de lo que vale su dinero.
Cuando se le preguntó sobre sus cercanos camaradas en el PGA Tour, Thomas mencionó sin sorpresa a Spieth, junto con Rickie Fowler. El vínculo entre Thomas y Spieth va más allá del campo de golf, siendo este último el padrino en la boda de Thomas.
Mientras que ningún jugador anhela el título de ‘mejor de los bunkers’ – una distinción que podría sugerir la necesidad de recuperaciones frecuentes de golpes deficientes – la destreza de Spieth en esta área es encomiable. Su capacidad para convertir disparos desafiantes desde el bunker en oportunidades es un testimonio de su habilidad y una parte importante de su atractivo. Son estos momentos bajo presión los que hacen que el deporte del golf sea un espectáculo emocionante para los espectadores y una prueba de temple para los jugadores.