En un giro sorprendente en el Abierto de Australia, la subcampeona del año pasado, Zheng Qinwen, fue eliminada en la segunda ronda por la veterana alemana no sembrada Laura Siegemund. La derrota por 7-6(3), 6-3 frustró las esperanzas de Zheng de seguir los pasos de la leyenda china Li Na, quien ganó el título en Melbourne Park en 2014.
Siegemund, clasificada en el puesto 97 del mundo y la segunda mujer más vieja en el sorteo a sus 36 años, realizó una actuación enérgica en el John Cain Arena para asegurar su primera victoria sobre una jugadora del top 10 desde 2022. La campeona olímpica Zheng, visiblemente fuera de forma y afectada por problemas de condición física, luchó por igualar la intensidad y determinación de Siegemund.
Emergen los problemas de condición física de Zheng
Zheng admitió después del partido que su preparación para el primer Grand Slam de la temporada había estado lejos de ser ideal. Después de alcanzar las finales del campeonato de fin de temporada de la WTA en noviembre, la joven de 22 años lidió con problemas físicos persistentes y se saltó los torneos de preparación previos al Abierto de Australia.
“Para mí, no había posibilidad de jugar un torneo antes del Abierto de Australia porque el tiempo fue muy apresurado,” reveló Zheng. “Tuve algunos pequeños problemas después de las Finales de la WTA. Mi equipo me aconsejó saltarme este Slam, pero yo insistí en venir aquí y competir.”
La decisión de Zheng de jugar pareció volverse en su contra ya que se la veía fuera de lugar, particularmente en momentos críticos del partido. A pesar de varias oportunidades para romper el servicio de Siegemund en el primer set, Zheng flaqueó, citando lapsos en su concentración.
“Fue una forma complicada de perder el primer set porque no rendí lo suficientemente bien,” admitió Zheng. “Al mismo tiempo, ella estaba jugando realmente bien hoy. Es tenis—nada más.”
El Momento de Gloria de Siegemund
Siegemund entró al partido sin nada que perder y todo por ganar. Mostrando calma y precisión, la alemana se llevó el primer set en un tiebreak, aprovechando su suerte y capturando puntos clave.
“Sabía que solo tenía que jugar más que mi mejor tenis,” dijo Siegemund tras la victoria. “Ella es una de las mejores jugadoras del mundo ahora, pero me dije a mí misma que debía jugar libremente y hacer de esto una pelea dura.”
Un quiebre temprano en el segundo set marcó el tono para la dominancia de Siegemund. Aunque Zheng se recuperó brevemente, la alemana rápidamente recuperó el control, cerrando el partido con su servicio y cayendo de rodillas en incredulidad al lograr la victoria más grande de su reciente carrera.
Una Salida Llorosa para Zheng
Zheng dejó la cancha visiblemente angustiada, al borde de las lágrimas, tras la derrota. La derrota marca un retroceso significativo para la quinta cabeza de serie, cuyas aspiraciones de replicar su actuación de 2024 se vieron frustradas por luchas tanto físicas como mentales.
Mientras tanto, la historia de hadas de Siegemund continúa mientras avanza para enfrentarse a Anastasia Pavlyuchenkova o Anastasia Potapova en la tercera ronda. Con su actuación valiente, la alemana ha recordado al mundo del tenis sus capacidades perdurables, incluso a los 36 años.