Chelsea y Everton están en desacuerdo sobre el futuro de Armando Broja, ya que los Toffees presionan para terminar el préstamo del delantero albanés tras un contratiempo por lesión de 10 a 12 semanas. Pero con ambos clubes manteniendo su posición sobre los términos financieros, la saga amenaza con volverse complicada.
La lesión que encendió la mecha
El préstamo de Armando Broja por toda la temporada en Everton ha pasado de mal en peor. El delantero de 22 años, firmado de Chelsea a pesar de las preocupaciones persistentes por su tendón de Aquiles, no ha logrado impresionar en Goodison Park, haciendo solo cinco apariciones en la Premier League sin registrar un solo gol o asistencia.
Ahora, apartado debido a una lesión en el tobillo que se espera lo mantenga fuera hasta por tres meses, el entrenador del Everton, David Moyes, ha decidido, según informes, que ya es suficiente. Los Toffees buscan cortar lazos y liberar un valioso espacio de préstamo, pero Chelsea no está dispuesto a separarse sin una compensación financiera.
Una disputa sobre la responsabilidad
El meollo de la disputa radica en el acuerdo financiero entre los dos clubes. Cuando Everton aseguró los servicios de Broja, Chelsea acordó pagar su salario durante cualquier ausencia derivada de su lesión en el tendón de Aquiles. Sin embargo, los Blues argumentan que el actual problema en el tobillo de Broja no está relacionado, lo que hace que Everton sea completamente responsable de su salario.
Everton, por otro lado, espera aprovechar el acuerdo inicial para forzar a Chelsea a terminar el préstamo antes de tiempo. Pero Chelsea se mantiene firme, exigiendo el pago completo del costo restante del préstamo antes de que acepten traer de vuelta a Broja a Stamford Bridge.
El desastroso paso de Broja por Everton
El préstamo de Broja a Everton ha estado lejos de ser el nuevo comienzo que necesitaba. Inicialmente marginado por una lesión, el internacional albanés luchó por encontrar forma o ritmo bajo el mando de Moyes. Con la plena asignación de cuatro fichajes a préstamo ya en uso, el club está ansioso por reemplazar a Broja con un jugador en forma que pueda contribuir a su lucha por la supervivencia en la Premier League.
Sin embargo, la terminación de su préstamo puede no mejorar las perspectivas inmediatas de Broja. Se espera que el delantero permanezca fuera de acción hasta abril, dejando su temporada en un limbo, ya sea que se quede en Everton o regrese a Chelsea.
¿Qué está en juego?
Para Everton, liberar un espacio de préstamo es crucial. Con su campaña en la Premier League en territorio precario, Moyes está desesperado por traer refuerzos durante la ventana de transferencias de enero. Sin embargo, la negativa de Chelsea a ceder sin garantías financieras podría dejar a los Toffees buscando alternativas.
Mientras tanto, para el Chelsea, la situación es igualmente frustrante. Aunque es poco probable que Broja forme parte de los planes de Enzo Maresca esta temporada, los Blues están decididos a proteger sus intereses financieros. Permitir que el Everton termine el acuerdo sin compensación podría sentar un precedente peligroso en futuros acuerdos de préstamo.
¿Qué sigue para Broja?
Independientemente del resultado de este enfrentamiento, la temporada de Broja parece casi terminada. Incluso si regresa a la acción a finales de abril, sus posibilidades de tener un impacto significativo son escasas. Sin embargo, un regreso al Chelsea podría ofrecerle un mejor entorno de rehabilitación y una oportunidad para demostrar su estado físico antes de la ventana de transferencias de verano.
A medida que se acerca la fecha límite de transferencias de enero, todas las miradas estarán puestas en las negociaciones entre Chelsea y Everton. ¿Encontrarán los dos clubes una resolución, o se convertirá esto en otro capítulo en una temporada de frustraciones para Armando Broja?