La tenista ucraniana Lyudmyla Kichenok se ha pronunciado después de enfrentar críticas por negarse a estrechar la mano de Kristina Mladenovic tras su partido de dobles de tercera ronda en el Abierto de Australia. Kichenok afirma que la jugadora francesa la amenazó verbalmente durante el partido, lo que la llevó a tomar su controvertida decisión.
El incidente
Kichenok y su pareja, Chan Hao-ching, cayeron 7-6 (3), 6-2 ante Mladenovic y Zhang Shuai. Tras el partido, Kichenok estrechó la mano de Zhang pero ignoró a Mladenovic, quien había extendido la suya.
Mladenovic criticó el comportamiento de Kichenok durante su entrevista en la cancha, calificándolo de mala deportividad y admitiendo que solo aumentó su motivación.
El incidente desató críticas en línea, con muchos aficionados acusando a Kichenok de faltar al respeto a su oponente.
La versión de Kichenok
Ante las críticas, Kichenok utilizó Instagram para explicar sus acciones, revelando que enfrentó una «amenaza muy directa» de Mladenovic durante el partido.
“Recibí una amenaza muy directa de mi oponente durante el partido después de golpearla accidentalmente con una pelota de tenis,” escribió Kichenok. “La respuesta a mis numerosas disculpas fue: ‘Ten cuidado la próxima vez.’”
Kichenok declaró que no consideraba apropiado mostrar respeto a alguien que había emitido amenazas verbales durante la competición.
“No considero apropiado el acto de respeto como el apretón de manos al final del partido con personas que usan amenazas verbales. Punto,” añadió.
Etiquetó a la WTA, al Abierto de Australia y a World Wide of Sports en su publicación, señalando su deseo de que se preste atención oficial al asunto.
Aficionados divididos
El incidente ha polarizado a los aficionados. Mientras algunos apoyan la decisión de Kichenok, citando su necesidad de enfrentarse a la intimidación percibida, otros argumentan que el espíritu deportivo debería trascender los conflictos personales.
Una creciente tendencia de tensiones post-partido
Esta controversia sigue una serie de desacuerdos y desaires de alto perfil en el mundo del tenis, reflejando un creciente enfoque en las interacciones post-partido. Mientras que los apretones de manos se ven tradicionalmente como un gesto de respeto mutuo, incidentes como este desafían la expectativa de que los jugadores dejen de lado todos los agravios personales por el bien de la tradición.
¿Qué sigue?
Tanto la WTA como el Abierto de Australia no han comentado sobre la situación al momento de escribir esto. Si los organismos de gobierno investigarán o mediarán sigue siendo una incógnita, pero el incidente subraya la intensidad emocional de la competencia de alto riesgo.
El mensaje de Kichenok es claro: el respeto debe ser mutuo, y ella se niega a comprometer sus principios ante lo que considera un comportamiento inaceptable.