Joe Rogan, renombrado presentador de talk show y comentarista de color de la UFC, compartió recientemente una estrategia poco convencional para que los golfistas triunfen en el «juego mental» del golf. En una revelación sorprendente, propuso que los golfistas consideren contratar a un hipnotista para mejorar su rendimiento, al igual que un hombre de esquina en los deportes de combate.
Rogan hizo esta revelación durante una conversación con el experto en comportamiento humano Chase Hughes en el episodio 2278 del Joe Rogan Experience (JRE). Según Rogan, golpear una pelota de golf no es la suma total del deporte; en cambio, implica una intensa estrategia mental comparable a los deportes de combate. Esta extraña sugerencia fue inicialmente provocada por una discusión sobre el caddie de Tiger Woods, a quien Hughes comparó humorísticamente con un hipnotista.
Rogan abrazó entusiastamente la idea, señalando que el golf implica grandes apuestas y requiere una cantidad significativa de compromiso mental. Dijo: “Si estás haciendo algo como golf, donde hay millones de dólares en juego, y eso es claramente un juego muy—muy mental, tiene sentido que un hipnotista sería efectivo.”
Hughes apoyó la noción de Rogan al trazar paralelismos entre el golf y la lucha. Citó el ejemplo de Mike Tyson, quien afirmó que su entrenador Cus D’Amato utilizó la hipnosis para inculcarle la creencia de que era el mejor luchador del mundo. Esta estrategia podría adaptarse potencialmente al golf, un deporte que exige no solo habilidad física, sino también precisión mental.
A pesar de la fascinación de Rogan por el deporte y la intrigante estrategia que propuso, ha admitido abiertamente que nunca jugaría golf él mismo. Esta sorprendente renuencia proviene de un miedo a la adicción. Citó ejemplos de sus conocidos, incluidos el comediante Ron White y el comentarista de la UFC Tony Hinchcliffe, quienes todos han sucumbido a la atracción del juego. De hecho, incluso Jamie Vernon, el productor del talk show de Rogan y un ávido entusiasta del golf, no ha logrado convencer a Rogan para que se dedique al deporte.
La aprensión de Rogan hacia el golf no disminuye su admiración por los jugadores, particularmente Tiger Woods. Rogan es un ávido fan de Woods, quien superó graves lesiones de un accidente automovilístico para restablecerse como una de las personalidades deportivas más resilientes. Sin embargo, Rogan, quien una vez confesó tener una adicción a los videojuegos, ha decidido mantenerse alejado del golf debido al riesgo potencial de otra búsqueda adictiva.
La sugerencia de Rogan de emplear a un hipnotizador para mejorar el rendimiento en el golf es poco ortodoxa y provoca reflexión. ¿Revolucionará el deporte o seguirá siendo una mera especulación? Solo el tiempo lo dirá. Mientras tanto, invitamos sus opiniones sobre este asunto.