Tiger Woods, el aclamado titán del golf, se ha visto obligado una vez más a posponer el inicio de su actual temporada en el PGA Tour debido a un reciente procedimiento quirúrgico. El analista deportivo, Dan Rapaport, especula que este retraso podría marcar el final de la carrera de Woods, ya que está preparado para perder una parte significativa de la temporada tras una cirugía en el tendón de Aquiles.
Ludvig Aberg, mientras tanto, sigue esperanzado por la pronta recuperación de Woods. La última aparición del ganador de 82 títulos del PGA Tour fue en el Open Championship el verano pasado. Woods logró participar en TGL, pero su equipo, Jupiter Links GC, desafortunadamente, no se clasificó para los playoffs en Florida.
En 2024, el campeón de 15 majors participó en apenas cinco inicios del PGA Tour. Esto incluyó los cuatro campeonatos importantes tras el Genesis Invitational.
Rapaport, ansioso por desmentir las narrativas recurrentes sobre Woods, expresó su sentimiento en su podcast, «Dan on Golf». Instó a los aficionados a abandonar la idea de que Woods regresaría a jugar con frecuencia este año. Enfatizó la gravedad de la lesión de Woods, describiéndola como una de las peores que un atleta, particularmente uno de 49 años, podría sufrir.
No está claro cuánto durará el período de recuperación de Woods, pero hay un sentido general de tristeza y decepción por su ausencia en el Masters.
Las recientes luchas de Woods con su condición física han sido evidentes, especialmente en momentos críticos. A pesar de llegar al campo, ha tenido dificultades constantes para mantener un rendimiento estable. Se retiró temprano del Genesis Invitational, pero logró un 60° lugar en el Masters.
Sin embargo, su rendimiento decayó en el PGA Championship, el US Open y The Open, con Rapaport comentando sobre los resultados mediocres de Woods en los cuatro años desde su accidente. La mejor clasificación que Woods pudo lograr en los últimos cuatro años fue un T45 en el Genesis Invitational.
Rapaport abordó el tema de la lesión de Woods en relación con la leyenda del golf Bernhard Langer, quien sufrió una lesión similar el pasado febrero. Langer logró una recuperación rápida, pero Rapaport advirtió contra establecer paralelismos entre los dos, especialmente dado el reciente tumulto emocional de Woods tras la muerte de su madre.
El analista reconoció que, aunque Langer, a pesar de ser 18 años mayor que Woods, estaba en mejor condición física, regresar de una lesión en el tendón de Aquiles es una tarea desalentadora incluso para aquellos en la cúspide de sus carreras. Concluyó, expresando la preocupación no dicha de muchos, que si el corazón de Woods no está completamente invertido en su recuperación, su regreso sigue siendo incierto.