A pesar de experimentar una segunda ronda menos que perfecta en el Players Championship, la sensación del golf norirlandés, Rory McIlroy, no está dejando que la decepción afecte su ánimo. El golfista de renombre mundial, que comenzó la temporada con una nota alta, había esperado llevar ese impulso a este torneo. Desafortunadamente, su juego se vio empañado por errores, específicamente bogeys en dos de los últimos cuatro hoyos. Estos errores lo han dejado a dos golpes del líder del torneo, el australiano Min Woo Lee.
McIlroy, actualmente clasificado segundo en el mundo, comenzó su juego en el hoyo 10. Comenzó con un birdie, y siguió con más en los hoyos 12, 14, 16 y 18, concluyendo con un respetable 31. Sin embargo, su segundo golpe en el hoyo par cinco 9 golpeó los árboles, resultando en un bogey. A pesar de este contratiempo, McIlroy parece estar más contento con esta actuación en comparación con sus presentaciones anteriores. Sus mejores golpes desde el tee y más oportunidades de birdie parecen haber aumentado su confianza. El golfista le dijo al Belfast Telegraph: «Mucho mejor, golpeé mucho mejor desde el tee. Creo que golpeé más calles en seis hoyos hoy que en 18 ayer.»
Con el pronóstico prediciendo un fin de semana ventoso, muchos competidores podrían sentirse intimidados. Sin embargo, McIlroy está anticipando con entusiasmo el desafío. Sus experiencias pasadas y su probada capacidad para manejar tales condiciones lo convierten en un favorito, incluso en condiciones adversas. El norirlandés tiene una reputación por prosperar en condiciones difíciles, y pretende aprovechar esto a su favor.
McIlroy expresó su emoción, diciendo: «Estoy emocionado por ello. Creo que va a ser realmente importante intentar controlar tu bola y mantenerla por debajo de la línea de los árboles.» También reconoció los desafíos que el viento puede presentar, añadiendo: «Este campo es lo suficientemente desafiante, pero con un viento como ese, sí, estoy emocionado por ese desafío.»
McIlroy planea controlar el vuelo de su bola, hacer diferentes golpes y jugar con creatividad—habilidades que siente han mejorado a lo largo de los años. A pesar de no haber cumplido con sus propios estándares en la segunda ronda, McIlroy se mantiene firme. Está abrazando el desafío del ventoso fin de semana que se avecina, demostrando la resiliencia y determinación que lo han convertido en un favorito entre los aficionados al golf en todo el mundo.