El nuevo jefe del Manchester United, Ruben Amorim, ha entrado en el centro de atención, defendiendo a las estrellas Marcus Rashford y Casemiro mientras enfatiza la necesidad de estándares más altos en el club. Los dos jugadores enfrentaron críticas, notablemente del legendario Gary Neville, por volar a EE. UU. durante el receso internacional a pesar de las dificultades del equipo en la Premier League.
Rashford disfrutó de un partido de la NBA en el Madison Square Garden de Nueva York, mientras que Casemiro realizó un viaje familiar a Disney World en Orlando. Neville criticó los viajes, calificándolos de “poco profesionales”, dado la precaria posición del United en la liga y el reciente despido de Erik ten Hag.
Amorim reconoció las preocupaciones de Neville pero defendió a sus jugadores, señalando la falta de directrices del club que restrinjan sus viajes. “Lo primero es que fueron cinco días libres,” explicó Amorim. “Son hombres adultos con familias; ellos deciden qué hacer. Pero el verdadero problema radica en el club—es nuestra responsabilidad establecer los estándares.”
El entrenador portugués dejó claro que bajo su liderazgo, se harán cambios. “En tu [de Neville] tiempo, la cultura ya estaba establecida. Ahora, es diferente. Debemos comenzar a construir esa cultura de nuevo, y comienza con nosotros como club,” dijo Amorim.
Neville Pide Profesionalismo
Neville, hablando en Stick to Football, reafirmó su crítica, particularmente hacia Casemiro. “Cuando tienes 30 años y gestionas tu cuerpo, debes considerar el impacto de los vuelos largos y el jet lag. Estos son pequeños detalles, pero importan si quieres estar en tu mejor forma.”
Amorim, sin embargo, instó a la comprensión, señalando que los jugadores actuaron dentro de las pautas que se les dieron. Prometió establecer expectativas más claras de cara al futuro mientras se esfuerza por reconstruir la identidad del United.
Un Club en Transición
El desafío de Amorim es grande, con el United languideciendo en el 13º lugar antes de su enfrentamiento con el Ipswich. Con la etapa interina invicta de Ruud van Nistelrooy elevando las expectativas, Amorim necesitará equilibrar la imposición de disciplina con la obtención de la confianza de su plantilla.
Para Rashford y Casemiro, la controversia subraya el escrutinio al que se enfrentan los jugadores del United durante tiempos turbulentos. La respuesta de Amorim sugiere que, aunque defenderá a su equipo públicamente, tras bambalinas, ya está trabajando para ajustar las cosas en Old Trafford.