Los Los Angeles Rams han cerrado su temporada regular con un título de la NFC Oeste, el primero desde su temporada ganadora del Super Bowl 2021-2022. Mientras se preparan para su partido de playoffs contra los Minnesota Vikings, el entrenador en jefe Sean McVay se tomó un momento para reflexionar sobre la evolución de su equipo y el impacto duradero del intercambio de Matthew Stafford, una decisión clave que transformó la franquicia.
Una Temporada de Resiliencia
La temporada de los Rams comenzó con incertidumbre, alimentada por cambios en la plantilla y preguntas persistentes sobre la profundidad e identidad del equipo. Sin embargo, el liderazgo de McVay ayudó al equipo a capear la tormenta, convirtiendo un mal comienzo de temporada en una campaña ganadora de división.
“Las decisiones que tomamos en el momento siempre se basan en lo que es mejor para el equipo,” explicó McVay. “Este año, se ha tratado de mantener el rumbo y confiar en el proceso. Mirando hacia atrás, creo que la mayor lección es nunca dar las cosas por sentado y siempre estar agradecido por el viaje, sin importar lo desafiante que pueda parecer.”
El Factor Stafford
La llegada de Stafford a Los Ángeles a través de un intercambio espectacular en 2021 fue el movimiento que desbloqueó las aspiraciones de Super Bowl de los Rams. Aunque las lesiones lo limitaron en la temporada 2023, Stafford regresó en 2024 para demostrar por qué sigue siendo uno de los mariscales de campo más confiables de la NFL.
McVay acreditó a Stafford no solo por su destreza en el campo, sino también por el liderazgo y la confianza que aporta al equipo:
“Matthew es un cambio de juego. Su inteligencia y competitividad mantienen a todos a un estándar más alto, incluyéndome a mí. Nuestros jugadores siempre sienten que tienen una oportunidad con él bajo el centro. Esa creencia—esa creencia auténtica—es contagiosa.”
Crecimiento Más Allá del Campo
Reflexionando sobre su trayectoria como entrenador en jefe, McVay enfatizó el crecimiento personal que ha experimentado desde que asumió el mando de los Rams en 2017. Ahora como padre, McVay reconoció la importancia del equilibrio y la gratitud en su enfoque del liderazgo.
“Ser entrenador en jefe a los 30 es un torbellino. Estás tan emocionado y enfocado en las X y las O, pero tiene un costo si no encuentras equilibrio,” dijo McVay. “Tener a mi pequeño y a mi esposa ha sido una bendición. Ha cambiado mi perspectiva y me ha recordado apoyarme en las personas y siempre esforzarme por ser una mejor versión de mí mismo.”
Mirando Hacia Adelante
A medida que los Rams se preparan para enfrentar a los Vikings, McVay tiene la esperanza de que las lecciones de esta temporada impulsarán una profunda carrera en la postemporada.
“Cada año trae nuevos desafíos y oportunidades para crecer,” concluyó McVay. “Este equipo ha pasado por mucho, pero estamos aquí porque hemos crecido juntos. Eso es lo que hace que este viaje sea tan especial.”
Con la mano firme de Stafford como mariscal de campo y el crecimiento de McVay como líder, los Rams entran a los playoffs como un contendiente peligroso, listos para construir sobre su éxito en la temporada regular y perseguir otro título de Super Bowl.