En un reciente enfrentamiento de fútbol, el joven talento del Arsenal, Myles Lewis-Skelly, fue criticado por su conducta en el campo, con el exdelantero de Blackburn Rovers, Chris Sutton, calificando sus acciones de ‘ingenuas’. A pesar de haber sido ya amonestado con una tarjeta amarilla, Lewis-Skelly estuvo involucrado en otra entrada controvertida que muchos creían merecía una penalización más severa.
Sutton expresó su incredulidad ante la decisión del árbitro de dejar pasar el incidente, exclamando: «Es muy afortunado de salir con eso. Eso es un poco sorprendente por parte del árbitro.» El incidente ocurrió después de que el defensor de 18 años ya había sido advertido en el minuto 24 por obstruir a Luuk De Jong del PSV. Apenas momentos después, Lewis-Skelly se encontró en medio de otra falta, esta vez, derribando a Richard Ledezma en el flanco derecho del PSV.
La afición local, junto con los jugadores en el campo, rápidamente clamó por una segunda tarjeta amarilla. Sin embargo, el árbitro optó por la leniencia, decidiendo mantener sus tarjetas cerca de su pecho y librando al joven jugador de una acción penal adicional.
Tras el incidente, los abucheos de los aficionados de Eindhoven resonaron por el estadio mientras Lewis-Skelly abandonaba el campo. En contraste, fue recibido con animados choques de manos de sus compañeros en la línea de banda. El joven jugador fue reemplazado posteriormente por Riccardo Calafiori.
Alan Shearer, comentando en la cobertura del partido de Amazon Prime, también destacó la precaria situación en la que se encontraba Lewis-Skelly, afirmando: “Es una situación un poco arriesgada cuando acaba de recibir una tarjeta amarilla hace un minuto. Estoy bastante seguro de que si no hubiera sido amonestado ya, eso ciertamente habría sido otra amarilla.”
Este incidente pone de relieve la importancia de la precaución y la moderación en el campo de fútbol, particularmente para los jugadores jóvenes que aún están navegando su camino a través del circuito profesional. El incidente también plantea preguntas sobre el juicio del árbitro, con muchos desafiando la decisión de no sancionar a Lewis-Skelly con una segunda tarjeta.
Mientras el debate continúa, una cosa es clara: el mundo del fútbol estará observando a Myles Lewis-Skelly con gran interés, esperando ver cómo evoluciona este joven jugador en su carrera y con la esperanza de que aprenda lecciones valiosas de incidentes como este.