En el mundo del tenis, el drama es tan parte del juego como los ases y los errores. La cancha se convierte en un escenario donde leyendas como John McEnroe, conocido por sus explosiones de ira, y Roger Federer, quien pasó de ser un joven temperamental a un caballero del juego, han actuado. Hoy, nos enfocamos en Corentin Moutet, quien parece estar construyendo su propio legado de controversia.
El último capítulo de la carrera polémica de Moutet se desarrolló en el Miami Open el 23 de marzo, durante su partido contra Alejandro Tabilo. El francés comenzó fuerte, dominando el primer set y liderando en el segundo. Sin embargo, el partido tomó un giro inesperado cuando el público, mayoritariamente pro-Tabilo, comenzó a incomodar a Moutet.
El francés ha tenido encuentros previos con el público chileno en Miami, especialmente durante sus triunfantes partidos contra otros jugadores chilenos. A medida que el apoyo a Tabilo aumentaba, la actitud tranquila de Moutet comenzó a desmoronarse, resultando en intercambios acalorados con el público.
Abordando este incidente en Instagram, Moutet declaró: «El público fue hostil desde el primer punto: ruido deliberado entre mis saques, silbidos, insultos y gestos provocativos.» A pesar de soportar esto durante 90 minutos sin respuesta, Moutet finalmente reaccionó, animando al público a hacer aún más ruido. Sin embargo, se encontró con un gesto obsceno de un espectador.
El drama se intensificó en el segundo set cuando Moutet comenzó a interactuar con el público, que animaba fervientemente a Tabilo. Un espectador particularmente vocal hizo un gesto obsceno hacia Moutet, lo que llevó a este a exigir la expulsión del individuo antes de reanudar el juego.
En un giro sorprendente de los acontecimientos, el árbitro penalizó a Moutet con un punto en lugar de intervenir, entregando así a Tabilo el segundo set 6-3. Greg Butyn de Dimers señaló que a pesar de que Moutet entró al partido con un 57% de posibilidades de ganar, la marea había cambiado drásticamente a favor de Tabilo.
Tras el incidente, Moutet enfrentó una avalancha de críticas. Admitiendo el efecto que tuvo en él, Moutet dijo: «Siempre he dado lo mejor de mí en mi profesión, he invertido mucho esfuerzo y he hecho innumerables sacrificios para alcanzar mis metas.» A pesar del caótico partido, Moutet demostró resiliencia, recuperándose de dos puntos de partido en contra en el set final, solo para finalmente perder el juego ante Tabilo 5-7, 6-3, 7-5.
Moutet aclaró que nunca faltó al respeto ni insultó a nadie durante el partido, y expresó su esperanza de que la ATP proteja mejor a los jugadores en el futuro, reduciendo tanto incidentes similares como las fuertes multas que los acompañan.
Esta no fue la primera vez que Moutet se vio envuelto en controversia. Apenas diez días antes, en el Phoenix Challenger en Arizona, tuvo un enfrentamiento candente con Alexander Bublik. Moutet lideraba 6-2, 3-1, pero Bublik luchó para arrebatar el segundo set en un tiebreak y construyó una ventaja contundente de 5-1 en el decisivo. El partido terminó en un acalorado cara a cara con Bublik desafiando a Moutet a pelear.
Mientras Moutet navega por las turbulentas aguas del tenis profesional, está claro que es un jugador que lleva su corazón en la manga. Si esta pasión alimentará su éxito futuro o conducirá a más controversias, está por verse. Solo el tiempo dirá si el francés puede aprender de estas experiencias y emerger como un jugador diferente en la cancha.