En las primeras etapas de su alianza profesional, la estrella del tenis Naomi Osaka y el renombrado entrenador Patrick Mouratoglou enfrentaron un desafío único. No se trataba de una falta de entendimiento o diferencias de opinión, sino de su naturaleza introvertida compartida que inicialmente ralentizó la progresión de su asociación.
Osaka, campeona de Grand Slam en cuatro ocasiones, estaba en una misión para reavivar su carrera tras su regreso después del embarazo. Desafortunadamente, el camino que estaba siguiendo no cumplía con sus expectativas, lo que llevó a la decisión de separarse de su entonces entrenador Wim Fissette después del US Open. Pronto anunció su nueva asociación de entrenamiento con Patrick Mouratoglou, mejor conocido por su papel prolongado como entrenador de Serena Williams.
Mouratoglou, compartió Osaka en el Tennis Channel, es un excelente entrenador y una persona intrigante. Sin embargo, siendo ella misma introvertida, admitió que iniciar conversaciones era un poco un obstáculo. Afortunadamente, a medida que pasaba el tiempo, su dinámica mejoró significativamente, y Osaka expresa optimismo sobre el futuro de su asociación.
Desde que se unió a Mouratoglou, el rendimiento de Osaka ha mostrado una mejora notable. Sin embargo, las lesiones han jugado un papel perjudicial, interrumpiendo el impulso que estaban construyendo juntos. Durante su torneo inaugural como dúo, Osaka avanzó a la ronda de 16 en el torneo WTA 1000 en Pekín, solo para retirarse debido a una lesión durante su partido contra Coco Gauff. El resto de 2024 no vio más participación de la estrella del tenis de 27 años.
Sin desanimarse, Osaka entró en la nueva temporada con renovado vigor, llegando a su primera final desde el Miami Open 2022. A pesar de un comienzo fuerte, una lesión abdominal la obligó a retirarse después de ganar el primer set de su final en Auckland. El Abierto de Australia también mostró un rendimiento prometedor de Osaka, donde venció a Caroline Garcia y Karolina Muchova antes de una retirada a mitad de partido contra Belinda Bencic.
A pesar de estos contratiempos, hay un sentimiento predominante de que si no fuera por las lesiones, Osaka y Mouratoglou ya podrían haber celebrado victorias significativas juntos. La buena noticia para los aficionados es que la jugadora de 27 años parece estar de vuelta en plena salud. Superó con facilidad sus primeros dos partidos en Miami, preparando un enfrentamiento en tercera ronda con Hailey Baptiste. Este resurgimiento es una señal prometedora para la asociación Osaka-Mouratoglou y un testimonio de su perseverante determinación.