Alexander Zverev, el eterno no aprovechador en torneos de Grand Slam, parece haber dado un nuevo giro en el Abierto de Australia 2025. Con dos victorias en sets corridos a su favor, la estrella alemana ha comenzado su campaña con una compostura y eficiencia que sugiere que ha aprendido lecciones valiosas de sus pasados desengaños. Para el número dos del mundo, este año representa no solo otra oportunidad, sino una misión para consolidar su legado en la historia del tenis.
Un Nuevo Enfoque para un Nuevo Año
Históricamente, Zverev ha sido criticado por gastar demasiada energía en las primeras rondas de los torneos de Grand Slam, dejándolo vulnerable en las etapas críticas. Pero el finalista del Abierto de Francia 2024 ha mostrado una nueva madurez en sus dos primeros partidos, despachando a Lucas Pouille y Pedro Martínez con precisión quirúrgica.
En lugar de caer en el desgaste de los intercambios prolongados, Zverev ha adoptado un enfoque agresivo, moviéndose frecuentemente a la red—un cambio táctico que ha dado sus frutos. Este cambio, combinado con su poderoso juego de fondo, señala a un jugador que está listo para adaptarse y evolucionar, cualidades esenciales para conquistar los escenarios más grandes del deporte.
Un Viaje de Redención
La hambre de Zverev por la gloria en Grand Slam es palpable, especialmente después de haber estado agonizantemente cerca en los últimos años. Su derrota en las semifinales del Abierto de Australia 2024 ante Daniil Medvedev aún perdura en la mente de los aficionados, un partido donde sus nervios lo traicionaron en los momentos finales. Sin embargo, el as alemán insiste en que esos momentos solo han alimentado su determinación.
“Este es un gran año para mí. He trabajado más duro que nunca, y estoy listo para mostrar lo que puedo hacer en las rondas decisivas,” dijo Zverev.
El avance del joven de 27 años a la tercera ronda marca otro paso en su arco de redención, pero sabe que el camino por delante está lleno de desafíos. Su próximo oponente, Jacob Fearnley, representa una oportunidad para afinar su enfoque mientras mira hacia la segunda semana del torneo.
Maestro de la Sesión Nocturna
Curiosamente, Zverev ha expresado una preferencia por jugar en las sesiones nocturnas de Melbourne, citando las condiciones únicas como una ventaja. “Me encanta jugar bajo las luces aquí. La superficie se siente perfecta, y la atmósfera es eléctrica,” compartió.
Su afinidad por la sesión nocturna no es solo psicológica. Es en estas condiciones donde Zverev llegó a las semifinales el año pasado, derrotando a Carlos Alcaraz en un emocionante enfrentamiento de cuartos de final. Su comodidad en los partidos en horario estelar podría resultar crucial a medida que navega por las etapas finales del torneo.
El Camino a Seguir: Superando la Última Frontera
A pesar de su fuerte inicio, Zverev es bien consciente de los desafíos que tiene por delante. Con Carlos Alcaraz, Daniil Medvedev y el campeón reinante Novak Djokovic aún en la contienda, el alemán necesitará mantener su enfoque y confianza para romper su maldición en los Grand Slams.
La clave, como siempre, será su capacidad para manejar momentos de alta presión, una habilidad con la que ha admitido haber tenido dificultades en el pasado. Pero Zverev insiste en que está listo. “He hecho muchas mejoras en los últimos meses, tanto física como mentalmente. Sé lo que se necesita para ganar, y creo que estoy listo para demostrarlo.”
Un Legado en Juego
Para Alexander Zverev, 2025 no es solo otro año; es su oportunidad para reescribir la narrativa. Durante mucho tiempo considerado como uno de los jugadores más talentosos de su generación, su incapacidad para conquistar un Grand Slam ha sido una omisión notable en un currículum de otro modo estelar.
Pero con una mentalidad renovada, un estilo de juego agresivo y las lecciones de fracasos pasados guiándolo, Zverev parece estar preparado para finalmente conquistar sus demonios internos y grabar su nombre entre las leyendas del tenis.