Carlos Alcaraz, la sensación del tenis español, era un contendiente principal para el Doha ATP 500 esta semana. Sin embargo, su viaje en el torneo de Qatar concluyó en los cuartos de final cuando fue eliminado por Jiri Lehecka. La actuación de Alcaraz fue una montaña rusa, marcada por una serie de altibajos. Reflejó la necesidad de mejorar sus habilidades de gestión de partidos, señalando que todavía hay margen para una mejora significativa.
A pesar de perder el primer set, Alcaraz, un ex número 1 del mundo, logró revertir el impulso del partido. Ganó el segundo set e incluso lideró con un quiebre en el tercero. El murciano de 21 años tuvo la oportunidad de ampliar su ventaja a 5-2. Sin embargo, el jugador checo Lehecka logró mantener su posición antes de lanzarse en una poderosa racha de cuatro juegos consecutivos.
El servicio de Alcaraz flaqueó en las etapas finales del partido, dando a Lehecka el valor para asegurar la victoria más significativa de su carrera. Esta derrota para Alcaraz, su segunda en la temporada 2025 tras su derrota ante Nole Djokovic en el Abierto de Australia, significó que perdió una oportunidad crucial para reducir la brecha con Alexander Zverev y Jannik Sinner en el ranking de la ATP.
A pesar de la suspensión de Jannik del circuito profesional hasta el 4 de mayo debido a un acuerdo con la WADA, Alcaraz enfrenta una tarea desafiante. Su aspiración de recuperar la primera posición para el Masters 1000 de Roma parece un sueño lejano. El actual número 3 del mundo todavía está significativamente detrás de su principal rival, y su salida temprana de Doha ha reducido aún más sus posibilidades.
Alcaraz reflexionó sobre su actuación, afirmando: «Quizás mi servicio podría haber sido mejor en la parte final del partido, pero no creo que haya jugado mal en ese momento. Tuve la oportunidad de liderar 5-2, y el partido podría haber terminado ahí, pero él jugó bien en ese momento y anotó algunos puntos brillantes en los siguientes juegos. Me esforzaré por aprender de esta derrota.»
La próxima parada de Alcaraz será el Masters 1000 de Indian Wells, un torneo donde ha disfrutado de victorias en las últimas dos ediciones. A medida que avanza, su enfoque estará en aprender de sus derrotas y mejorar su juego para ascender en el ranking de la ATP.