El mundo del tenis ha sido testigo recientemente de un resurgimiento en la carrera de Qinwen Zheng, impulsado por la determinación, la tenacidad y un impulso indomable por tener éxito. A pesar de una salida decepcionante en la segunda ronda del Abierto de Australia y de pérdidas iniciales en la gira por Oriente Medio, Zheng se recuperó de manera impresionante. Su tenacidad estuvo en plena exhibición en Indian Wells, donde luchó para llegar a los cuartos de final, una actuación que dejó a espectadores y oponentes igualmente asombrados. La pregunta en labios de todos es: ¿Qué está alimentando este resurgimiento?
El desempeño de Zheng en el Abierto de Miami 2025 ha sido nada menos que excepcional, consolidándola aún más como una fuerza a tener en cuenta en la cancha. El 20 de marzo, triunfó sobre la contendiente estadounidense Lauren Davis en un emocionante partido de segunda ronda con un marcador convincente de 6-1, 7-5. En una reveladora entrevista posterior al partido, Zheng atribuyó su resurgimiento a su entrenador, Pere Riba, y su incesante búsqueda de la excelencia.
Zheng habló abiertamente sobre cómo el regreso de Riba a su lado fue fundamental para superar un periodo desafiante en su carrera. «El enfoque intransigente de Pere y su negativa a dejarme relajarme en la cancha es lo que me impulsa hacia adelante», declaró. «Durante su ausencia de tres meses, luché con problemas físicos y no pude entrenar a plena capacidad. Sin embargo, su regreso parece haberme puesto de nuevo en el camino correcto.»
La asociación Zheng-Riba ha sido un tema clave de conversación en los círculos del tenis desde que unieron fuerzas por primera vez en 2021. Su colaboración ha sido comparada con una sinfonía de perfecta armonía. A pesar de una breve separación en el verano de 2023, durante la cual Riba entrenó a Coco Gauff, para diciembre de 2023, el dinámico dúo estaba de vuelta en acción. Bajo la tutela de Riba, Zheng llegó a su primera final de Grand Slam en el Abierto de Australia y se llevó el oro en los Juegos Olímpicos de París 2024.
La temporada 2025 no ha estado exenta de pruebas para Zheng. La cirugía de cadera de Riba a principios de año dejó a Zheng sin su entrenador y mentor de confianza. Además, el entrenamiento de Zheng se ha visto obstaculizado por una manga en su brazo derecho, lo que podría afectar su servicio. Sin embargo, ella se mantiene inquebrantable ante estos desafíos, demostrando una resiliencia que refleja su triunfante temporada 2024.
Zheng fue una jugadora destacada en el tenis femenino en 2024, un año marcado por picos triunfantes y valles desafiantes. Llegó a las finales tanto del Abierto de Australia como de las Finales de la WTA, y su mayor gloria fue, sin duda, su victoria con medalla de oro olímpica en París. Sin embargo, 2025 aún no ha logrado replicar este nivel de éxito, siendo su mejor resultado hasta ahora una aparición en cuartos de final en Indian Wells.
Reflexionando sobre su desempeño en 2024 en una reciente conferencia de prensa, Zheng reconoció: «Mi temporada 2024 fue una montaña rusa, con su buena dosis de altibajos. Hay muchas lecciones por aprender. Aunque la final de Riad fue un punto culminante, podría haber tenido un mejor desempeño en la final.» A pesar de perder el emocionante partido a tres sets en las Finales de la WTA 2024 en Riad contra Coco Gauff, Zheng considera esto una victoria en sí misma, ilustrando la naturaleza del juego y su perspectiva hacia él.
La carrera de Zheng, marcada por altibajos significativos, enfatiza la importancia del compromiso y la consistencia. Ella cree: «La condición física es crucial, y si no puedes dedicar tiempo en la cancha, siempre habrá alguien que esté practicando más duro, deseándolo más. La dedicación es clave. Debes concentrarte en tu práctica, independientemente del resultado.»
A medida que Zheng avanza a la ronda de 32 en el Miami Open, está lista para enfrentarse a Taylor Townsend o a la 19ª cabeza de serie Yulia Putintseva. ¿Guiará su juego rejuvenecido hacia un mayor éxito en Miami? ¡Comparte tus pensamientos con nosotros!