El retirado superestrella del tenis estadounidense, Steve Johnson, ha expresado su escepticismo sobre el reciente veredicto de la prohibición por dopaje al actual número uno del mundo, Jannik Sinner. A la luz del acuerdo alcanzado entre la Agencia Mundial Antidopaje (WADA) y la Agencia Internacional de Integridad del Tenis (ITIA) con Sinner, Johnson considera que los arreglos son bastante sospechosos.
WADA había apelado inicialmente el veredicto de la ITIA y estaba buscando imponer una suspensión de uno a dos años al sensacional tenista de 23 años. Sin embargo, el escenario dio un giro cuando Sinner aceptó una prohibición de tres meses, una decisión que se espera sea impugnada en una audiencia del Tribunal de Arbitraje Deportivo (CAS) programada para mediados de abril.
Las sospechas de Johnson se vieron aún más alimentadas por la sincronización de la conclusión de la prohibición. El embargo se levantará el 4 de mayo, a solo tres días de la fecha de inicio del Masters de Roma. Además, son estratégicamente tres semanas antes del Abierto de Francia, posicionando a Sinner para participar en ambos eventos.
Sinner, un ganador de tres títulos de Grand Slam, tendrá que renunciar a cuatro torneos Masters debido a su suspensión. Sin embargo, podrá competir en su evento Masters en casa y no se perderá ninguno de los Majors.
Hablando en el podcast Nothing Major, Johnson compartió sus opiniones: “Toda la situación me huele a sospecha. No estoy aquí para discutir sobre inocencia o culpabilidad, pero el momento de la prohibición y sus implicaciones parecen cuestionables. Es extraño que esté suspendido exactamente tres meses y, aun así, no se pierda torneos significativos. Justo a tiempo para competir en el Masters de Roma y no se pierde ninguno de los Slams. Hay algo en esto que no me cuadra del todo. Pero esa es puramente mi opinión.”
La controvertida decisión ha desatado un amplio debate sobre si Sinner recibió un trato preferencial. La intensidad de la conversación llevó a un funcionario de WADA a negar públicamente cualquier favoritismo de su parte. A pesar de esto, los murmullos sobre un ‘trato favorable’ persisten en la comunidad del tenis, arrojando una sombra sobre la integridad del deporte.