Sean “Diddy” Combs permanece bajo custodia mientras su equipo legal exige acceso sin restricciones a una computadora portátil para preparar su defensa contra los cargos de trata de personas y crimen organizado.
Sean “Diddy” Combs, el rapero y magnate de la música de 55 años, está enfrentando obstáculos legales mientras se encuentra detenido en el Centro de Detención Metropolitano en Brooklyn. Acusado de trata de personas y crimen organizado en septiembre, Combs se ha declarado no culpable, pero su equipo de defensa ahora afirma que las restricciones en su acceso a una computadora portátil proporcionada por el gobierno están poniendo en peligro su capacidad para montar una defensa adecuada.
Los abogados de Combs presentaron una solicitud formal el miércoles al Juez de Distrito Arun Subramanian, solicitando permiso para que él use la computadora portátil en su unidad de detención. Argumentan que el arreglo actual, que limita el acceso a la computadora portátil a momentos y lugares específicos, no solo es “insostenible” sino también inconsistente con los privilegios otorgados a otros reclusos.
La Batalla Legal se Intensifica
Según documentos judiciales, Combs recibió acceso a la computadora portátil por primera vez el 25 de noviembre para revisar materiales de descubrimiento, tomar notas y ayudar en su defensa. Sin embargo, su equipo legal alega que no se le ha permitido usarla desde esa fecha a pesar de múltiples solicitudes.
Los funcionarios del gobierno informaron que Combs solo podría usar la laptop en la sala de videoconferencias durante horarios específicos o en la sala de visitas legales entre las 8 a.m. y las 3:30 p.m. Estas condiciones, afirman sus abogados, obligan a Combs a elegir entre usar la laptop o reunirse con sus abogados, lo que dificulta significativamente su preparación.
“Esto es una violación de sus derechos y de su capacidad para defenderse”, dijo un comunicado del equipo legal de Combs.
Denegaciones Repetidas de Libertad Bajo Fianza
La solicitud de acceso a la laptop se produce tras múltiples solicitudes de libertad bajo fianza denegadas. El juez Subramanian, quien negó la solicitud más reciente el 27 de noviembre, citó la gravedad de los cargos y preocupaciones sobre la seguridad de la comunidad.
Combs es acusado de operar una empresa criminal que coaccionó a individuos para participar en actos sexuales durante varios años. Los fiscales también han alegado manipulación de testigos, incluyendo a Combs iniciando contacto con un testigo citado antes de una audiencia ante un gran jurado.
Subramanian dictaminó que no había “ninguna condición de liberación” que pudiera garantizar la seguridad pública si se le otorgara la libertad bajo fianza a Combs.
Un Caso Complicado
Las alegaciones contra Combs han cautivado la atención pública, con su equipo legal ahora denunciando lo que perciben como un trato desigual. “Estas restricciones no están en línea con cómo otros reclusos en su unidad pueden usar sus laptops”, afirma el documento legal.
A medida que se desarrolla el caso de alto perfil, la lucha por el acceso a herramientas de defensa añade otra capa de complejidad. Si el tribunal concederá la última solicitud de Combs está por verse, pero la batalla por su capacidad para preparar una defensa subraya los desafíos de navegar un caso de esta magnitud desde detrás de las rejas.